Sin senos sí hay paraíso - Nachito le vende el alma al diablo

Nace Catalina chica

Cuando visita la tumba de su hijo, Hilda Santana recibe una noticia terrible. Al dar a luz a una niña, decide llamarla como a su hija mayor.

Catalina ama a Hernán

Catalina incumple las normas de su familia, cruzando la línea del peligro de la que tanto habla su madre. Martina debe convencer a Catalina de que se opere el pecho.

Arrestan a la familia de Catalina

Daniela y la Diabla se salen con la suya: han detenido a la familia de Catalina y a su novio. Un emisario roba un documento importante de los Santana.

Catalina sufre torturas

Catalina es duramente castigada en el correccional. Daniela pide que liberen a Nachito y que lo contraten como su guardaespaldas.

Catalina trata de escapar

Catalina huye del hospital, pero la libertad le dura muy poco. La Diabla sabe que el acta de matrimonio da derecho a Hilda Santana a acceder a la fortuna de Marcial.

Catalina saca las uñas

Catalina está cansada de los abusos de la cárcel y empieza a defenderse. El doctor Rico se queda sin trabajo por haberla ayudado.

Catalina queda libre

La Diabla saca a los Marín Santana y a Nachito de la cárcel, antes de que lleguen los periodistas y las autoridades. Después, contrata a un hacker.

Catalina jura vengarse

Las carceleras obligan a Catalina a firmar un documento en el que dice que no recibió maltratos físicos ni psicológicos. Ella jura vengarse de la Diabla y sus secuaces.

Catalina amenaza a Daniela

La Diabla y el coronel Herrera comentan el caso de Cerón. Catalina toma una mala decisión movida por su sed de venganza.

Catalina hace negocio con Martina

Catalina se siente tentada por dos opciones para ganar dinero ilegalmente. El periodista que visita a los padres de Catalina se queda en la calle. Su vida corre peligro.